Los jóvenes de 16 y 17 años ya fueron indagados por la Justicia. Aguardan informes sobre relevamiento de cámaras de seguridad. La viuda solicitó ingresar a la causa como querellante.
A tres semanas del hecho, dos adolescentes de 16 y 17 años permanecen detenidos por homicidio culposo en el marco de la causa iniciada tras los piedrazos que desencadenaron el siniestro vial que acabó con la vida del gendarme Fabio Marquina (33) en Garupá y la viuda de la víctima ya inició los trámites para incorporarse como querellante particular en la investigación que se lleva adelante bajo la órbita del Juzgado Correccional y de Menores Uno de Posadas.
De acuerdo a lo consignado por fuentes consultadas, los dos jóvenes que después del hecho fueron alojados en la Unidad Penal IV de Menores de Miguel Lanús ya comparecieron a declarar ante la Justicia y mientras avanzan las medidas de prueba dispuestas en el marco de la pesquisa continúan privados de su libertad acusados por el delito de homicidio culposo.
Las fuentes indicaron que ambos adolescentes fueron llevados ante las autoridades apenas la Policía elevó al juzgado el sumario policial con todas las actuaciones del caso y ahora se aguarda por la recepción de algunos informes específicos, principalmente relacionados a los registros de cámaras de seguridad de la zona, para resolver la situación de los dos involucrados.
En paralelo, tal como lo había adelantado en una entrevista posterior al hecho, la viuda de la víctima, Camila Cardozo -también gendarme-, avanzó con los trámites correspondientes para constituirse como querellante particular en la causa que investiga la muerte de su marido y para esa labor designó al letrado Claudio Martínez.
“Queremos que lleguen a juicio”
“Ya hicimos el pedido de constitución como querellantes en la causa y ahora estamos a la espera. Posiblemente, el martes, de tener noticias favorables, iremos a firmar el cargo”, confirmó Martínez.
Si bien aún no forman parte activa del expediente porque deben esperar que el juzgado admita el pedido de constitución formulado, Martínez adelantó que “en el escrito hicimos algunos pedidos ya. Primero, para tomar conocimiento de todo el expediente. También pedimos la grabación de los locales comerciales de la zona porque la cámara de la provincia no estaba apuntando hacia el lugar del hecho. Eso es un gran problema, estaba movida o algo, pero no nos sirve la información que pueda llegar tener a esa filmación. Sé además que ya han declarado varios testigos, pero en caso de que falte alguno vamos a pedir que se los cite a todos. Sé que hay un colectivero que también está dispuesto a declarar”.
En esa línea, el profesional aseguró que desde la querella tiene un objetivo muy claro: “También vamos a pedir que estos chicos continúen detenidos, aunque sabemos que en cualquier momento pueden ser excarcelados. Se supone que hay un involucrado más, que es mayor de 16 y que por lo tanto está en la edad, y queremos que también sea imputado. Nosotros queremos tratar de que estos chicos que hacen vandalismo en esa ruta puedan llegar a juicio, aunque sea en libertad pero que por lo menos tengan su juicio como corresponde”.
Además, desde la querella que espera su admisión, solicitarán mayores medidas de seguridad para Cardozo, en virtud de que los otros dos chicos de 14 años presuntamente involucrados en el hecho residen en el mismo barrio que la mujer y temen represalias.
“Vamos a pedir que se labre algún pedido a partir del juzgado porque los otros chicos que están libres, como son vecinos de la señora Cardozo, estaban amenazando e incluso festejando que se había muerto un gendarme”, agregó Martínez.
Las fuentes consultadas indicaron que hasta el momento la causa se instruye como homicidio culposo, pero las autoridades al frente de la investigación aguardan completar todas las medidas de prueba pendientes para analizar y evaluar si existe la posibilidad de solicitar un cambio de calificación.
“Esto no fue un juego simplemente. Todos hemos hecho macanas de adolescentes pero en este caso arrojaron piedras a varios autos y en ningún momento se asustaron o salieron corriendo como para detenerse, incluso después de haber impactado contra tres autos le tiraron a un cuarto y eso fue lo que desencadenó la desgracia. Yo quisiera tomar contacto con todas las declaraciones, pero si cabe alguna otra imputación un poco más grave la vamos a pedir, por supuesto”, culminó Martínez.
Piedrazos y desgracia
El hecho que derivó en la muerte de Fabio Marquina ocurrió el 7 de mayo a la noche, sobre la autovía de la ruta nacional 12, en Garupá.
Por esa arteria circulaba Marquina al mando de su automóvil particular en compañía de su pareja Cardozo y una de sus hijas, hasta que recibieron unos piedrazos que habían sido lanzados desde un puente peatonal.
El gendarme decidió frenar su vehículo y descender del mismo para revisar el estado del rodado, pero en esa instancia un nuevo proyectil impactó en el parabrisas de otro auto cuyo conductor terminó despistando y arrollando a Marquina frente a su esposa.
“Cuando nosotros paramos ya había otros dos autos que habían parado por lo mismo. Mi marido se bajó a ver si había pasado algo en el auto y yo me acerqué un poco más al puente para ver si veía gente. Ahí volvieron a tirar otra piedra, que podía haberme dado a mí, a mi hija o a cualquiera. Ellos no pararon al ver lo que habían generado, siguieron y en eso le tiran otra piedra al auto que venía atrás”, relató Cardozo en una entrevista con este diario.
Tras el siniestro, Marquina, que era de Jujuy y prestaba servicios en el Escuadrón 50 de Gendarmería Nacional Argentina (GNA), fue trasladado al hospital pero falleció pocas horas después.
En paralelo, efectivos policiales salieron en búsqueda de los adolescentes involucrados e inicialmente hubo cuatro demorados, de entre 14 y 17 años, de los cuales los dos mayores de 16 quedaron alojados en el penal de menores de Miguel Lanús a disposición de la Justicia.