Erico Álvarez, exsecretario general del gremio, indicó que la ley todavía no se pudo aplicar por las apelaciones judiciales de las empresas y justificó la medida que promovió la renovación.
El exdirigente gremial de Papeleros de Misiones y diputado renovador (mandato cumplido), Erico Álvarez, explicó que la declaración de insalubridad de la actividad está fundamentada en que “el promedio de vida de los compañeros es 65 años, sufren la consecuencia del proceso productivo de la industria, más que nada respiratorio y de piel”.
En declaraciones, indicó ayer que “esto es consecuencia del proceso industrial. Si bien es cierto que se ha mejorado la salubridad, la gente sigue sufriendo el impacto del proceso productivo”.
Se manifestó a favor del decreto provincial publicado el martes en el Boletín Oficial.
Recordó que esa declaración surgió por una ley provincial: “En su momento le plantee al compañero Carlos Rovira, como ingeniero químico entendió que era necesario que avanzáramos y se aprobó”.
Y también explicó que para llegar a que se declare insalubre “la UNaM hizo un estudio por pedido de la autoridad de aplicación. Se determinó que el 100% de los trabajadores sufren las consecuencias”.
La acción directa, luego de confirmar el impacto, es que se debe reducir la jubilación a los 55 años y reducir de 8 a 6 horas las jornadas laborales.
Actualmente esto no se aplica porque las empresas acudieron a la Corte Suprema de Justicia y apelaron todo el proceso. Por lo tanto no se pudo implementar ni la reducción horaria ni la nueva edad de jubilación.
“Creo que no molesta mucho la reducción de horario. Va a significar 30 trabajadores más a una empresa que gana mucho dinero, económicamente no es nada. Lo que no les debe gustar es que se declare industria insalubre, pero no es la única que se declara insalubre”, señaló.
Y agregó que “en el mundo se está revisando la reducción horaria, esto va a ser un anticipo de lo que va a pasar en el futuro”.
Igualmente, el dirigente lamentó que se haya perdido mucho tiempo, casi 10 años, desde que sea probó ley y todavía no entró en vigencia por las apelaciones. “Lamentablemente perdimos muchos compañeros en el camino, y uno de ellos era mi amigo personal y exsecretario general del gremio, Lorenzo Barrientos”, rememoró.
Destacó a los sucesivos gobernadores que ratificaron el apoyo a la iniciativa legislativa que se votó en el Parlamento misionero, por la decisión política de Rovira para llevar adelante la medida.