Encabeza la lista de precandidates a Diputades Nacionales en la Provincia de Buenos Aires por el Frente de Todes. Lleva años en la política, pero cobró notoriedad en las últimas semanas por sus dichos sobre el sexo en el peronismo.
Más que una “cara bonita”
En marzo de este año, en el programa A dos Voces, conducido por Marcelo Bonelli en TN, en el marco de un debate sobre la Reforma Judicial Feminista, la entonces presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales discutía con el diputado macrista Fernando Iglesias, que sostuvo que era dificil intercambiar con ella porque “es mujer y es bonita”. En aquel momento, el nombre de Victoria Tolosa Paz aún no era tan reconocido, pero la dirigenta peronista traía consigo algo más que una “cara bonita”: venía de muchos años de formación política y militancia, algo que Iglesias invisibilizó en un segundo de cámara al hacer énfasis en su apariencia.
Durante los 90’s, Tolosa Paz empezó a militar en la provincia de Buenos Aires en el marco del duhaldismo. Oriunda de La Plata y egresada como contadora pública de la Universidad Católica de esa localidad, fue parte del Consejo Provincial de la Familia y Desarrollo Humano bonaerense, presidido por Hilda “Chiche” Duhalde. Posteriormente, con la llegada de Eduardo Duhalde a la presidencia de la Nación durante la crisis del 2001, se sumó como asesora del Ministerio de Desarrollo Social.
En 2003, con el gobierno de Néstor Kirchner asumió como jefa regional del Fondo Participativo de Inversión Social (FOPAR), un programa que buscaba atender la emergencia alimentaria. En 2012 tomó un cargo como subsecretaria de Urbanismo Social durante la gestión bonaerense de Daniel Scioli, y en el último gobierno de Cristina Fernández de Kirchner se incorporó al ANSES a través del programa de Generación de Lotes con Servicios del Plan PROCREAR.
En las elecciones presidenciales del 2019, disputó en la interna del Frente de Todes la intendencia de la ciudad de La Plata, pero perdió frente a Florencia Saintout. Finalmente, en el gobierno de Alberto Fernández asumió al frente del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, cargo al que renunció a mediados de este año, cuando fue elegida para encabezar la lista del Frente de precandidates a diputades nacionales por la provincia de Buenos Aires.
Además de una larga carrera militante, Victoria es madre “de tres hijos y uno del corazón”, según contó en uno de sus primeros spots de campaña. Su tradición política la enmarca dentro del “albertismo”, aunque tiene mucha llegada a la vicepresidenta.
Goce y mercurio retrógrado
La reivindicación del goce en los discursos de Tolosa Paz no es una novedad. Sin embargo, bastó con que la precandidata dijera la palabra “garchar” durante una entrevista transmitida por YouTube para que los medios y la política se llenaran la boca hablando de prioridades y buenas formas.
“En el peronismo siempre se garchó, es así. Nosotros vinimos para hacer posible la felicidad de un pueblo y la grandeza de una patria, y no hay felicidad de un pueblo sin garchar. Perdón, nosotros somos así. Lo que digo, es parte importante de la vida, el baile, el disfrute, el goce, no lo vamos a ocultar. Somos seres humanos, nos gusta gozar, nos gusta divertirnos”, dijo Tolosa Paz en el encuentro con Pedro Rosemblat y Martín Rechimuzzi.
Las respuestas no tardaron en llegar: “Por más garche que haya, el pueblo es infeliz si no hay equidad social”, apuntó el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, a lo que María Eugenia Vidal, precandidata a diputada en CABA por la lista de Juntos, sumó que “el Gobierno subestima a los jóvenes, dejemos que que ellos se ocupen de su sexualidad, nosotros tenemos que encargarnos de que tengan trabajo y educación”. “Los peronistas hacemos el amor, lo hacés y terminás abrazado. Si Victoria hubiese dicho eso, estaba todo bien”, acotó Guillermo Moreno.
El tema se mantuvo en agenda durante una semana. Cuando parecía que el chiste ya se había agotado, Radio Mitre tituló: “Victoria Tolosa Paz, la sibila de Olivos”, porque durante una entrevista en Intratables, la candidata bonaerense señaló: “No solo nosotros tenemos carta astral, los países tienen carta astral, la Argentina es cáncer ¿Por qué es cáncer? Por el día que se independizó como país, 9 de julio de 1816, hay movimientos en el mundo que estudian las cartas de los países y ven cómo son. Es muy interesante”.
Y agregó: “De ahí sale la crisis del 29′ en Estados Unidos, el derrumbe de las Torres Gemelas, por qué pasa lo que pasó en la crisis de 2001”. A modo de respuesta, el periodista Luis Novaresio escribió en una columna de Infobae: “La verborrágica Victoria Tolosa Paz se encamina a quedar en la historia electoral de la Argentina como la intérprete de la calidad y cantidad de sexo que tienen los dirigentes y por su explicaciones astrológicas a la hora de ver las crisis económico sociales”.
El feminismo en la política
En 2019, durante un panel titulado “Mujeres al Frente: militancia y liderazgos femeninos en la política argentina” en el marco de un encuentro por los 100 años de Evita, Tolosa Paz sostuvo que “hay algo de Eva que menos cuentan y es la organización del Partido Peronista Femenino. Esa organización fue una semilla que sembró y permite decir que era feminista porque incluyó a las mujeres en la política”. Desde Evita y las sufragistas hasta la actualidad, sin duda las mujeres e identidades feminizadas y disidentes han ganado fuerza en el terreno de la real politik.
Este 9 de septiembre se cumplen 74 años desde la sanción de la Ley 13.010 del voto femenino, el reconocimiento hacia la participación de las mujeres en la política. Luego se aprobó la Ley de Cupo Femenino, superada por la Ley 27.412 de Paridad de Género en Ámbitos de Representación Política. En la actualidad, sólo 28 de las 72 bancas en el Senado están ocupadas por mujeres (38,9%), mientras que en Diputados son 109 de las 257 (42,4%). Para el año 1952, entre los 30 senadores nacionales, 6 eran mujeres, y las diputadas conformaban apenas el 15% de la cámara baja.
Aunque todavía falta mucho, las discusiones sobre cupos han permitido -mal que le pese a Milei- visibilizar la absoluta hegemonía de varones al frente de cargos públicos y también de las listas electorales. Sin embargo, sumar mujeres a la política no implica que el feminismo (o los feminismos) la interpelen y la vayan modificando. Son las prácticas y sentidos las que cambian las formas de hacer las cosas. Que una mujer encabece una lista es un avance y una conquista, pero como evidencia el caso de Tolosa Paz esto todavía viene con sentidos machistas y patriarcales que tenemos que revertir y tirar.
Que la astrología y el goce -la primera fuertemente asociada a lo femenino y el segundo negado para nosotras- se hayan convertido en trending topic, muestran el lugar en el que todavía nos encasillan. Más allá de valoraciones políticas sobre Victoria Tolosa Paz, de acuerdos con su línea, ideología y proyecto político, a las mujeres nos siguen descalificando en base a prejuicios y estereotipos de género, sin importar cuántos años llevemos militando y dirigiendo nuestras organizaciones y partidos.