“Fue papá quien me inculcó esto y hoy doy gracias de poder correr. No está físicamente con nosotros, pero sé que gracias a él, hoy estoy donde estoy”.

Cada prueba finalizada es para Santiago Prates, un agradecimiento al cielo. Y ese mismo gesto fue el que tuvo recientemente al ganar el Campeonato Misionero de Karting en Pista, en la categoría Master 200 cc.m que se desarrolló en el Autódromo Ciudad De Oberá. Es que su papá, Jorge, que lo dejó físicamente hace algunos años, fue quien lo acercó a esta disciplina, casi sin querer, queriendo. Es que el hombre se desempeñaba como mecánico y era preparador de autos de carrera. Y Santiago mamó todo eso desde pequeño.

“Comencé a correr gracias a Hugo “Mono” Stanganelli, un amigo de mi papá, cuando apenas tenía doce años. Me inicié en la categoría escuela del karting en pista. Pero, en realidad, siempre estuve ligado a esto porque siempre le acompañaba a mi papá a las carreras o me paseaba por su taller”, dijo el joven, que cursa el quinto año especialidad automotores en el Instituto San Arnoldo Janssen, de Posadas.

Manifestó que “me gustaría poder llegar lo más lejos posible, pero soy consciente que se trata de un deporte muy caro en el que es difícil progresar”.

Comentó que fue su papá quien “me inculcó esto y hoy doy gracias de poder correr. No esta físicamente con nosotros, pero sé que gracias a él, hoy estoy donde estoy”.

En los estudios, “voy muy bien por suerte, no me llevo nada hasta el momento. Además, le meto ganas porque sino no corremos”, añadió a modo de broma.

El joven, recordó que “fuimos subcampeones durante el primer año en que corrí, en 2016, en la categoría Escuela. No pudimos correr en 2017 y 2018 por falta de presupuesto. Pero en 2019 hicimos un gran esfuerzo para volver a correr y pudimos debutar en la categoría standard. Nos fue relativamente bien, tuvimos muy buenos resultados parciales. No podíamos concretar siempre el resultado final, pero fue, dentro de todo, un año bueno”.

En el 2020, “no se corrió debido a la pandemia, se hizo una sola en la que terminamos sextos. Este año cambié de categoría, me fui a la Master 200 cc. y ganamos cinco de las siete carreras. Resta una que se realizará el 27 y 28 de noviembre. Pero ya logramos el campeonato”, dijo, quien recibe el apoyo constante de su mamá, Ana María Pietro y de su hermano Luciano, que es incondicional.

Santiago aseguró que “para mi hoy, correr es todo. Estoy ligado 100% al automovilismo y pensando siempre en progresar. Tenemos ganas de dar el salto al misionero de pista, estamos enfocados en eso”. Cuando concluya sus estudios en el Janssen, pretende continuar la carrera de ingeniería en la ciudad de Oberá, “aunque no está bien definido porque todavía falta un año de cursado”.