El Juzgado de Instrucción de San Vicente giró el expediente a la fiscalía por la elevación a juicio. Está acusado de “lesiones leves agravadas, amenazas y abuso sexual con acceso carnal, hechos reiterados”

A comienzos de este año se había conocido la detención de un meteorólogo domiciliado en San Vicente, por supuestos casos de violencia de género y abuso que había cometido contra su concubina. La investigación avanzó rápidamente y ahora está a un sólo trámite para que el caso se cierre en la etapa de instrucción.

Según pudo saber, el Juzgado de Instrucción 3 a cargo del magistrado Gerardo Casco giró el expediente a la fiscalía para que consideren si es necesario anexar algún elemento probatorio o formal, para así elevar el caso a un tribunal para que el hombre de 43 años sea juzgado.

Está imputado por los delitos de “lesiones leves agravadas, amenazas y abuso sexual con acceso carnal en reiterados hechos” cometidos contra su concubina. Luego de años de padecimiento finalmente la mujer se animó a denunciarlo y en sede judicial confirmó que sus hijos también eran golpeados por el padre.

El pasado 20 de enero el caso había tomado trascendencia luego que la mujer de 36 años se dirigiera a la comisaría de la Mujer a denunciar a su concubino, conocido públicamente como un meteorólogo, empleado del Ministerio de Ecología que prestaba servicios en la Dirección de Alerta Temprana. Conocida la denuncia y su detención, el hombre había sido separado de su cargo de forma preventiva.

El día del hecho que motivó la presentación en la seccional según consta en la denuncia, el hombre había llegado a su domicilio, donde luego se desató una fuerte discusión con su concubina. Uno de los hijos no soportó la situación de peligro que se suscitaba y llamó a un familiar para pedir ayuda. Le dijo que su madre estaba contra la pared, tomada del cuello por su padre quien amenazaba con matarla. Esa persona al otro lado de la línea llamó a la policía que acudió rápidamente al lugar.

La mujer decidió irse de la casa en compañía de sus hijos, de 17 y 6 años, resguardados por el personal de la Unidad Regional VIII.

El médico policial constató las lesiones que tenía la mujer, hecho que luego quedó plasmado en detalle cuando lo denunció formalmente.

Luego que el juzgado analizara pruebas y testimonios de las víctimas, en junio pasado el juez decidió dictarle la prisión preventiva, hecho que fue apelado por la defensa, pero esto luego fue rechazado en instancia de Cámara.