La menor de 11 años fue sustraída de su madre por un exconvicto condenado por el delito de “sustracción de menores”. La familia es de Campo Viera pero se encontraban en el microcentro posadeño al momento del hecho. El acusado fue detenido en el acceso a Garupá.

Todo comenzó el pasado miércoles cuando una mujer, junto a sus dos hijas menores de edad y un hombre a quien conoce como Víctor, arribaron a la capital provincial luego de viajar desde Campo Viera para realizar compras en el microcentro.

Según lo relatado por la mujer en sede policial, viajaron desde el interior de la provincia a los fines de comprar ropa para luego venderlas en su localidad, en compañía de sus hijas de siete y once años y de un hombre cercano a la familia. Al tomar un descanso en la plaza 9 de julio, la mayor de las niñas se fue del lugar junto a “Víctor”, sin indicarle el destino, pero creyendo que regresarían pasados unos minutos.

Ante la desesperación, la mujer se presentó en la Comisaría de la Mujer a radicar la denuncia por sustracción de la menor y comenzaron los rastrillajes y operativos de búsqueda por parte de la Policía de Misiones.

Pasadas poco más de 24 horas, efectivos de la Policía Federal abocados a los controles vehiculares en la rotonda del acceso a Garupá sobre ruta 12, manifestaron que los automovilistas dieron aviso que habría una menor siendo llevada a la fuerza por una persona adulta.

Por tal motivo, se trasladaron hasta el lugar e interceptaron al hombre acompañado de la menor, quien fue identificado como Silvio Ramón V. de 63 años. El mismo expresó ser el tío de la niña y que no poseía la documentación de la menor debido a que los papeles se habrían perdido como consecuencia de un incendio.

Expuso los pasajes de colectivo con destino de Posadas a Campo Viera con su nombre, el de la menor y de la madre de las niñas y aseguró que la adolescente de 11 años quería conocer el Arroyo Garupá y por esa razón habrían ido caminando hacia ese lugar.

El hombre fue detenido y la menor fue puesta bajo contención de profesionales pertenecientes a la Comisaría de la Mujer, donde la madre de la niña había radicado la denuncia 24 horas antes.

Tras averiguaciones practicadas por el Juzgado de Instrucción en turno, se estableció que el detenido había sido juzgado por el delito de “sustracción de menores” y cumplió su condena de ocho años en la Unidad Penal II de Oberá.