El Hospital Pediátrico ‘Fernando Barreyro’ atiende una alta demanda. En el 90% de los casos hay sobrevida. Insisten en la ecocardiografía fetal en las embarazadas

El Servicio de Cardiología del Hospital Pediátrico ‘Fernando Barreyro’ se encuentra en una etapa de intenso trabajo dada la demanda constante, teniendo en cuenta que además de los pacientes de Posadas, se atienden los casos derivados de los municipios que no cuentan con la especialidad, como también se trabaja de manera conjunta con el Hospital Materno Neonatal (HMN) en el diagnóstico fetal.

El equipo liderado por Marcela Woloszyn atiende por día 40 consultas ambulatorias, de las cuales al menos ocho son diagnosticados con alguna cardiopatía. Si bien los profesionales de la salud destacan como positivo que el 90% tienen tratamiento y sobrevida, resulta necesario mayor compromiso en el cumplimiento de la ley vigente desde 2012 que establece una ecocardiografía fetal en las embarazadas entre la semana 20 o 22 de gestación.

“Tenemos por día 40 pacientes ambulatorios, que llegan al consultorio de Cardiología por alguna sospecha. De esos, algunos quizás son pacientes crónicos de seguimiento que están en pre o posquirúrgico o bien de ese grupo se detectan cardiopatías (…) De esos 40 pacientes, ocho son cardiópatas, que pueden tener cardiopatías muy simples o complejas. Son consultas de niños desde el mes de vida hasta los 15 años”, sostuvo Woloszyn en diálogo.

“A veces se confirma una sospecha o se descarta. A eso se suma los que están en piso, internados por otra causa, los que ingresaron por una convulsión y se les detectó una arritmia cardíaca, los que entraron por un asma y terminan con cardiopatía asociada”, describió el abanico de atención.

Existen muchos tipos de cardiopatías congénitas y se clasifican en simples o complejas, de acuerdo a la gravedad. Las que más frecuentemente se detectan en la provincia son las llamadas simples: ductus, comunicación interauricular y comunicación interventricular.

 Woloszyn es especializada en cardiopatías congénitas y referente provincial del Programa Nacional de Cardiopatías Congénitas. Participará este viernes, en Corrientes, de una jornada regional de cardiología con autoridades de Nación. En ese espacio, las provincias del NEA deberán presentar su realidad.

“Somos más comparados a cuando arrancaron los mayores diagnósticos en 2010. En 2010 se incorporó (Lisandro) Benmaor -actual presidente del Instituto de Previsión Social- , en 2012 me incorporé yo y al día de la fecha ya hay uno de los cardiólogos, Joaquín Ratti, que se ocupa más del Hospital Materno Neonatal haciendo la parte de cardiofetal y neonatología, que es desde cuando nace hasta el mes de vida, con ayuda de los residentes, que por suerte pudimos abrir una residencia en Cardiología. Necesitamos sucesores sabiendo que Misiones es una provincia con muchas patologías cardíacas congénitas”, señaló, al tiempo que agregó: “En el Pediátrico incorporamos una especialista, que dos veces por semana va a Oberá y desde allá ayuda con la pesquisa de diagnóstico”.

Los esfuerzos por incorporar recurso humano y tecnología están a la vista, en tanto Woloszyn admitió que todavía hay una parte importante que falta desarrollar que son las cirugías de alta complejidad.

“Desde que se inició empezó todo este proceso (en 2010) y se comenzó a operar, todo es cardiopatías simples. Nos falta equipamiento para hacer más operaciones y de mayor complejidad. Estamos en proyecto de incorporar más aparatología, pero no es sencillo”, señaló.

Cuadros simples y graves

“Yo, que estoy en eco, veo ocho o diez pacientes por día y de esos diez pacientes que veo, ocho tienen cardiopatías. Mi población es mayor porque me encargo del alto riesgo, entonces los que llegan a mí ya son pacientes diagnosticados, que están esperando confirmar la cardiopatía o el momento quirúrgico, o están en seguimiento o están volviendo de su centro tratante para seguir el tratamiento. Lo cierto es que tenemos mucha demanda y nos dividimos así para atender: bajo riesgo, mediano y alto riesgo” detalló.

“Llamamos de mediano o alto riesgo a aquellas cardiopatías complejas que a veces pueden estar asociadas a síndrome genético u otras malformaciones como renales, patología neurológica, que ameritan no sólo una evaluación exhaustiva cardiológica sino también de las otras especialidades por eso todo decanta en Posadas. En el interior tenemos un par de cardiólogas en Eldorado, Oberá, Puerto Rico, pero el resto de las especialidades no. Genética, neurología y neumología infantil hay poco y nada en el interior”, comentó la especialista.

“Con respecto a los recién nacidos, por mes se pueden llegar a detectar, de nuestra maternidad o de los que llegan derivados, por lo menos tres cardiopatías complejas que necesitan derivación inmediata o en las primeras semanas de vida, ya sea al Garrahan o al Hospital Posadas en Buenos Aires o a Corrientes”, indicó.

Causas

Consultada sobre los factores que influyen en la aparición de cardiopatías congénitas, la jefa del Servicio de Cardiología, explicó: “La mayoría son idiopáticas, es decir, no hay causa específica, a veces tiene que ver la edad de la madre, madres muy jóvenes o muy añosas, cardiopatías previas en hermanos o en la madre, y otra cosa que nos incide mucho es el tema de los agrotóxicos”.

“Tenemos muchos niñitos viviendo con padres que son tabacaleros o de alguna otra rama productiva; los chiquitos nacen con malformaciones no sólo cardíacas sino de otra índole del síndrome genético”, destacó.

No obstante, reforzó el concepto de que la mayoría de las cardiopatías no tienen un disparador.

“A veces son embarazos sumamente cuidados y controlados, padres sanos, sin antecedentes y los chiquitos nacen con cardiopatía. A veces la etiología, la causa, es muy arbitraria”, contó y añadió: “Lo que tenemos de bueno hoy en día es que más del 90% de las cardiopatías se corrigen. Los chicos tienen sobrevida. Son muy pocos casos los llamados incompatibles con la vida, que están asociados al síndrome genético, que son trisomía 13 o trisomía 18; esos chiquitos no tienen chance de nada. Son muy pocos los casos. A veces fallecen en Neo y algunos llegan al año de vida, pero no tienen expectativa de vida en ninguna parte del mundo por lo complejo del síndrome que afecta múltiples órganos”.

Indicadores

“Existe una ley promulgada en 2012 que la había propuesto Lisandro Benmaor: que toda embarazada debería tener dentro del screening, como se hacen las ecografías de rutina, una ecocardiografía fetal que la hacen los cardiólogos u obstetras que hicieron la formación cardio fetal. Entendemos que a veces somos pocos los especialistas para atender tanta demanda, pero también muchas veces vemos en consultorio público y privado que el obstetra no pide esa pesquisa fetal, por más que tenga o no factores de riesgo desde la semana 20 o 22 de embarazo”, aseveró.

En la ecocardiografía lo que se hace es un paneo general para ver cómo está ubicado el feto en el vientre de la madre y luego se enfoca en el tórax del bebé para evidenciar el corazón y los grandes vasos sanguíneos. Así se puede detectar ya cuando el niño está formándose si tiene o no una malformación congénita compleja en el corazón y hacer el seguimiento adecuado y si es necesario derivar a otro especialista para evaluar si necesitará algún tipo de cirugía en las primeras horas o días de vida.

En el caso de los niños sanos, sin antecedentes o factores de riesgo, se recomienda  “un chequeo cuando van a iniciar la etapa escolar, que el cardiólogo lo vea, le palpe los pulsos, la pancita, le haga electrocardiograma, placa de tórax y listo”.

“¿Qué le podría llamar la atención a un papá o a una mamá?  Que no aumente de peso, que vive con cuadros respiratorios, que son frecuentes los cuadros de bronquiolitis, que vive irritable. O tiene una patología respiratoria o tiene una patología cardiológica que genera que haya sobrecarga del corazón y genera todos estos síntomas que son de insuficiencia cardíaca y que puede ser que el corazón tenga anomalía. O lo otro: cuando al chico le falta el oxígeno en sangre porque tiene algo obstructivo a nivel cardíaco y la manifestación va a ser: que no quiere comer, que se pone azulado los labios, que llora y se pone morado, que se desmaya y esas cosas deben llamar la atención”, enumeró respecto a qué situaciones podrían alertar a los pediatras para una derivación o bien a los padres para concretar una consulta.