Se trata de un felino de pequeño tamaño, cuya distribución se extiende desde centro-este de Brasil, hasta el nordeste de Argentina
Un docente e investigador de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) registró y documentó por primera vez en la provincia de Corrientes a un ejemplar de tirica (Leopardus guttulus)
Se trata de un felino de pequeño tamaño, cuya distribución se extiende desde centro-este de Brasil, hasta el nordeste de Argentina. En este país había registros fehacientes de esta especie solo en la provincia de Misiones.
En 2003 señalaron su probable presencia histórica en los Esteros del Iberá, aunque lo consideran extinto en Corrientes.
El trabajo de investigación fue publicado como nota anticipada en la revista científica Acta Zoológica Lilloana y fue realizado por Mario Luis Chatellenaz, del Laboratorio de Ornitología y Mastozoología, Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura (FACENA).
Chebez (2008) menciona que “en Corrientes cuenta con pocas citas en el nordeste”, sin brindar más información, aunque atribuye una piel observada en un comercio de la ciudad de Santo Tomé (Corrientes) a esta especie.
El 13 de febrero de 2023 fue hallado un ejemplar atropellado por un vehículo, a pocos metros del puente interprovincial sobre el arroyo Chimiray, que comunica la localidad de Colonia Liebig (departamento Ituzaingó, Corrientes) con la provincia de Misiones.
El tirica posee una capacidad para trepar árboles con destreza. Sus patas traseras son más largas que las delanteras, lo que le permite realizar saltos y movimientos ágiles entre las ramas. Así, debido a esta adaptación en su hábitat, puede cazar presas también en los árboles.