Indicaron que los trabajadores del volante “se bancan el manoseo” por la necesidad laboral, y que, en muchos casos, deben pasar entre 12 a 18 horas diarias manejando para llevar algo de dinero a sus hogares.

En Misiones los taxistas atraviesan una etapa con diversas complicaciones, principalmente, por los elevados costos generales, siempre en crecimiento, a lo que se suma la escasa demanda del servicio, dentro de un contexto donde los potenciales clientes ven reducidas sus posibilidades de pagar diariamente la bajada de bandera y el recorrido por la caída del poder adquisitivo.

En ese sentido, cada vez se expande más el malestar entre los peones de taxis que comienzan el día a pérdida, debiendo cubrir con los primeros viajes los costos del alquiler por la utilización del automóvil, la recarga de combustible, y otros detalles necesarios para brindar un servicio correcto al cliente.

Por ello, Alfredo Gamarra, titular del Sindicato de Peones de Taxis de Misiones, en diálogo cuestionó que “ahora, más que nunca se está sintiendo el abuso de los propietarios de los vehículos por lo que cobran de alquiler para que el peón de taxi trabaje cada día”.

“Hubo un aumento del alquiler en diciembre del año pasado, y ahora están aumentando de nuevo. Los propietarios y empresarios siempre le culpan a la pandemia, pero en ese momento también la pasaron mal los peones, y ahora sigue muy complicado para todos”, apuntó a amplió: “Por la necesidad laboral, los trabajadores se bancan el manoseo de ver que todos sus gastos aumentan y que cada vez ellos ganan menos”.

Al mismo tiempo, detalló: “El alquiler más barato de un auto está $2.000 pesos por día, a eso se suman $1.500 de nafta que sirve solamente para hacer 100 o 120 kilómetros, más la comisión de empresa que la más barata está 600 pesos. Ahí ya se superan los 4.000 pesos que el peón de taxi arranca perdiendo todos los días, poniendo como ejemplo a las bases más baratas”.

Además, aclaró que “los aumentos de combustible se pagan con lo que sale del bolsillo del chofer, como muchos otros gastos que deben cubrirse en el día a día”, y agregó: “A esto se suma el lavado del auto, comer un sanguchito, tomar una gaseosa entre los viajes, en total son alrededor de $5.000 todos los días. Es el único rubro en el que se empieza trabajando con todo en contra. Después de los $5.000 el trabajador recién empieza a ganar algo para su bolsillo”.

En ese contexto, describió que “el trabajador del volante ya comienza el día preocupado porque tiene que llegar a los $2.000, $2.500, o $2.800 de base, lo que sea que tenga que pagar por el alquiler del vehículo. Pero si se trabaja a porcentaje en el día podrán estar más holgados, más tranquilos, porque no será con tanta presión. Queremos que se trabaje según el convenio colectivo de trabajo, dividiendo porcentajes, entonces de esa forma no sufre nadie. Si hay ganancia que sea para los dos, y cuando se pierde pierden los dos, el chofer y el propietario”.

“No puede ser que tengan que estar de 12 a 18 horas por día arriba del taxi manejando. Un trabajador después de las 8 horas ya está fundido, y por eso se corren muchos riesgos manejando”, subrayó.

Para finalizar, denunció que “los que no quieren invertir para mejorar las condiciones de un vehículo son los titulares. Hay autos con destornilladores sosteniendo los vidrios, o que se sacuden, pero el trabajador tiene la necesidad de llevarse un dinero todos los días para la comida de su familia, y así y todo son los propios trabajadores los que en muchos casos, ponen su plata para arreglar algo y poder seguir laburando. Cuando se rompe algo, los titulares lo primero que dicen es ‘vamos a parar el auto un tiempo’ y ahí pierde el peón”.

Empezar preocupado
“El trabajador del volante ya empieza el día preocupado porque tiene que llegar a $2.000 de base, por el alquiler del vehículo. Queremos que se trabaje dividiendo los porcentajes”, plantearon desde el Sindicato de Peones de Taxis de Misiones.

Para no invertir
“Los que no quieren invertir para mejoras las condiciones de un vehículo son los titulares. Cuando se rompe algo, los titulares lo primero que dicen es ‘vamos a parar el auto un tiempo’, y ahí pierde el peón”, describió.