La maniobra buscaba acceder a una mayor cantidad de dólares a precio oficial. En la operación intervenían 4 empresas con vínculos societarios y comerciales, y domicilios en común. Compartían al proveedor de las mercaderías en China y el despachante de aduanas.
Con una agenda activa para detectar irregularidades en el comercio exterior, la Aduana denunció en la Justicia Penal Económica maniobras de sobrefacturación de importaciones para dos empresas textiles importadoras de barbijos. Detectó que habían declarado el valor de los productos importados por un monto de hasta el 800 por ciento mayor que el original para acceder a una mayor cantidad de dólares a precio oficial.
La denuncia es producto de una serie de fiscalizaciones que viene llevando la Aduana con la nueva gestión de Guillermo Michel como director general: “En la reunión de trabajo del gabinete económico coincidimos con el Ministro de Economía, Sergio Massa, y el titular de AFIP, Carlos Castagneto, en transparentar las operaciones de comercio exterior y cuidar los dólares para la producción y el trabajo argentino”, explicó Michel.
En este caso fueron dos empresas del rubro textil que declararon el ingreso al país de barbijos a valores muy superiores a los del mercado internacional e inclusive del nacional. Una de las empresas declaró un contenedor con 880.000 barbijos KN-95 a un valor total de compra en China de 858.684 dólares, es decir, un valor unitario en origen de 0,97 dólares por barbijo. El valor equivaldría a alrededor de 130 pesos cada uno precio mayor al que se adquiere localmente estos productos en comercios minoristas. En total, se trata de 1,7 millones de barbijos sobrefacturados. La entrada de estos productos se hizo además sin pagar derechos de importación gracias al decreto N° 333/2020 dictado durante la emergencia sanitaria por Covid-19.
En otro de los contenedores de las mismas empresas los inspectores descubrieron plaquetas de video para minar criptomonedas con una sobrefacturación de 800 por ciento. Son 300 plaquetas que se declararon productos de alta calidad y prestaciones técnicas a un valor unitario de 7.999 dólares, cuando en realidad pudo determinarse que el valor unitario real es de 990 dólares.
Por antecedentes de operaciones recientes se estima que el valor real de la mercadería importada ascendería a 563.000 dólares, mientras que el valor declarado en las operaciones investigadas fue de 4.120.000 dólares, es decir una sobrefacturación total estimada de un 730 por ciento. La Aduana radicó la denuncia ante el Juzgado Nacional en lo Penal Económico Nro. 11 e interviene la Fiscalía Nacional en lo Penal Económico Nro. 7, que tiene delegada la instrucción. La mercadería se encuentra incautada por la Aduana.
Fiscalización masiva
«Vamos a denunciar en la justicia argentina y la unidad antilavado de Estados Unidos casos de subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones», determinó Sergio Massa en su primera conferencia de prensa como ministro de Economía demostrando que esta denuncia de la Aduana forma parte de un plan de la DGA que implica detectar y penalizar estas operaciones en un marco de escasez de divisas en las arcas del Banco Central y el Tesoro Nacional.
Aduana puso en práctica una fiscalización sistémica de importaciones con triangulación comercial de mercadería proveniente de China y refacturada desde Estados Unidos. Dicha fiscalización abarca, en un primer esquema de trabajo, a 722 firmas importadoras que documentaron 13.640 operaciones de importación por un monto de U$S 1.254 millones.
Esta semana se enviaron los primeros 150 requerimientos a firmas que importaron mercadería de los siguientes rubros: computación (plaquetas de video y máquinas para minar criptomonedas), fertilizantes, químicos orgánicos, reactivos para COVID y teléfonos celulares, entre otros.
«Si bien la triangulación no es una irregularidad en sí misma, la fiscalización masiva tiene como objetivo la detección de sobrefacturación de importaciones con el objetivo de hacerse de dólares al precio oficial de manera ilegal», aseguraron en el organismo. En esa línea, se analizarán los precios usuales del mercado de China, se cotejarán dichos precios con las bases de información a las que accede la Aduana por su Convenio de Cooperación con ese país y se los compulsará con los valores documentados por las firmas importadoras.
Complementariamente, se inició un cruce sistémico entre lo documentado ante la aduana argentina y lo declarado ante la aduana de Estados Unidos en operaciones provenientes de ese país. Dicha información es obtenida del intercambio de información existente entre ambas aduanas (la de nuestro país y la de Estados Unidos). Adicionalmente, y con el objetivo de agilizar el cruce de información para operaciones futuras, se implementó la obligatoriedad de declarar en cada destinación de importación, el número de Documento de Exportación de Estados Unidos (ITN – Internal Transaction Number).