La funcionaria ocupó el cargo de secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable. La Fiscalía pidió una condenada a tres años y nueve meses de prisión y que devuelva casi siete millones de pesos.
El Tribunal Oral Federal 6 dará a conocer este lunes el veredicto en el marco del juicio oral contra la ex secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación Romina Picolotti por el presunto uso de fondos públicos de ese organismo para gastos personales como comidas, regalos y viajes.
Durante el proceso, la Fiscalía pidió que la ex funcionaria nacional sea condenada a tres años y nueve meses de prisión y que devuelva casi siete millones de pesos por el perjuicio al Estado.
Fuentes judiciales informaron que la audiencia comenzará a las 8 de la mañana de manera virtual, tal como se hizo todo el juicio. Primero el fiscal Diego Luciani contestará los pedidos de nulidad que planteó la defensa de Picolotti y luego la ex funcionaria tendrá la opción de decir sus últimas palabras antes del veredicto -previsto para las 16 horas-, a cargo de los jueces Sabrina Namer, Rodrigo Giménez Uriburu y Guillermo Costabel.
El veredicto estaba previsto para el próximo miércoles pero por la agenda del Tribunal Oral fue adelantado para este lunes.
Picolotti, secretaria de Ambiente entre 2006 y 2008, en los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, está acusada del delito de defraudación en perjuicio de la administración pública, por haber utilizado fondos del organismo para gastos personales y de familiares. La secretaría dependía de la jefatura de Gabinete que entonces estaba a cargo de Alberto Fernández, presidente de la nación.La ex funcionaria junto al entonces jefe de Gabinete y actual presidente, Alberto Fernández
“Hubo un manejo absolutamente irregular de parte de Picolotti de los fondos públicos. Fue un verdadero fraude en el ejercicio de la función pública. Se pagaron comidas o almuerzos casi diariamente sin justificación, se pagaron pasajes de avión para familiares y amigos que no tenían relación con la secretaria y costosos vuelos charters”, sostuvo Luciani en su alegato.
Entre los gastos, el fiscal detalló comidas en parrillas, desayunos, restaurantes de sushi, flores, productos de farmacia, alimento balanceado para perros, carga de combustible, lavado de auto, servicio de lavado de ropa, compra de piedras aromatizadas, sahumerios. En su alegato expuso las facturas de varios de ellos. Uno de los tickets que expuso fue uno de los gastos que más llamó la atención. Es de 77,50 pesos en “Hooters”, un bar que era atendido por mujeres semidesnudas y lleva escrito un “Muchas gracias”. Otro gasto, en el local Pigmento, dice “regalo Flor y Sofi de cumpleaños”.
La Fiscalía sostuvo que el monto actualizado de esos gastos 6.941.170,25 de pesos que pidió que los devuelva como parte de la condena. La ex funcionaria había firmado un convenio con la Fundación ArgenINTA que para que administre los fondos públicos de la Secretaría. “Desde la fundación no se hacía ningún análisis de los gastos”, sostuvo el fiscal.
La defensa de Picolotti, a cargo del abogado Felipe Trucco, pidió la absolución. Sostuvo en su alegato que “las pruebas demuestran la inexistencia del hecho” porque no está comprobado que la firma de los comprobantes de los gastos sea de Picolotti. “Ella negó expresamente que esas firmas le correspondieran y en la causa no se hizo una pericia caligráfica a pesar que lo solicitamos. ¿”Qué pueden probar facturas en las que no se entiende la letra? No hay pericia contable, ni caligráfica”, sostuvo el abogado.
Romina Picolotti, antes de la pandemia
Trucco también resaltó que los pagos fueron avalados por el personal de la Secretaría que cumplía esa función. “Son gastos absurdos, ridículos, irrazonables para la trayectoria de Picolotti”, agregó el abogado en su pedido de absolución.
La defensa también pidió la absolución por la “duración irrazonable del proceso” que lleva 14 años y la nulidad de la indagatoria y de la elevación a juicio del caso. Eso deberá responder el fiscal Luciani este lunes, al inicio de la audiencia.
Picolotti sigue el juicio por videoconferencia desde los Estados Unidos, donde vive desde 2015 y trabaja para una asociación civil de medio ambiente.
La causa se inició en 2007 y fue investigaba por la jueza federal María Servini y el fiscal Guillermo Marijuán. El caso fue elevado a juicio oral en 2015 y el proceso comenzó en febrero de este año.
Cuando se inició la causa Alberto Fernández defendió a Picolotti. ”Se copió una carpeta que estaba dando vueltas, que no era más que una operación política para lastimar a una funcionaria del Gobierno”, dijo el hoy Presidente tras la publicación del caso que hizo el diario Clarín. Cuando dejó el gobierno y Picolotti fue procesada sostuvo que ella debía dar las explicaciones necesarias y que la imputación por la que fue procesada era por un tema que él desconocía.
En el inicio del juicio Picolotti negó la acusación. “Niego rotunda y categóricamente la acusación en mi contra. No realicé ni autoricé los gastos relatados en la acusación. Se me acusa de comer bifes de chorizo y sándwiches de milanesa pero los que me conocen saben que soy vegetariana. También de comprar vinos y cervezas cuando no tomo alcohol”, había dicho ante los jueces.