El Coordinador del Programa Provincial de Estudio de Animales Venenosos, Roberto Stetson, confirmó que hubo un incremento en las consultas que se origina en un cambio de hábitos de la población, que estando encerrada en sus viviendas por el confinamiento contra el coronavirus (Covid-19), se dedica a hacer limpieza o jardinería y se encuentra con arácnidos y con insectos ponzoñosos.
Y remarcó que en invierno, el clima artificial relativamente cálido de los hogares calefaccionados, atrae a algunos arácnidos, lo que demanda una serie de precauciones para evitar picaduras. En particular, con la araña de los rincones (Loxosceles laeta) y con dos especies de escorpiones que están presentes en la provincia.
Según explicó Stetson, en el invierno, “uno crea un clima (artificial) cálido en los hogares” que “hace creer a los animales que es verano, la mayor actividad biológica se da en los veranos. Y también ocurre que uno busca las ropas y calzados de invierno, que suelen estar en armarios y baúles que no se usan frecuentemente y no están muy iluminados. Ahí aparecen arañitas como la araña del rincón”, detalló Stetson y acotó: “Hay que prestar atención cuando se hace uso de estas vestimentas, que no haya telas de araña”.
“Esta arañita es muy domiciliada, es nocturna y no es agresiva. Pero cuando uno se coloca un zapato o ropa donde estaba ella y la aplasta, ella se defiende picando. Es una de las arañas de importancia médica en la provincia”, señaló el funcionario.
El problema de los alacranes
Asimismo, Stetson puntualizó que también pueden aparecer escorpiones en invierno, “en casas con muchos muebles. Con la calefacción pueden aparecer. Siempre son nocturnos. Todos son venenosos, pero algunos tienen venenos que son más tóxicos que otros”, precisó.
“En Misiones tenemos 4 especies, dos de color oscuro y dos de color claro. Estos últimos son los de importancia médica, tienen un veneno neurotóxico y puede ser mortal para niños”, alertó. “Hay que prestar atención a estos arácnidos, se reproducen en las cámaras sépticas, y buscan su alimento, que son las cucarachas, suben por las cañerías de noche y aparecen en las bachas, las rejillas y bañeras”, comentó Stetson, que recomendó “mantener las cañerías limpias, con desengrasantes, lavandinas y agua hirviendo, y a la noche cerrar estos orificios con tapas o rejillas”.
También pidió “tener los patios limpios y tener cuidado al mover escombros en los patios. Es mejor usar guantes”, dijo el especialista.
Por otra parte, Stetson confió que, en tiempos de pandemia y restricciones a la circulación de personas, “la gente consulta más porque en este periodo se quedó en su casa y se dedica a hacer limpieza y encuentra cosas que antes no encontraba. O hace más actividades de jardín y se expone más a orugas, hormigas, abejas y abejorros”, comentó.