Según el economista Gerardo Alonso Schwarz, el dólar sólo creció el 20% contra una inflación que avanzó en un 53%, cuando “deberían seguir al mismo ritmo”. “Hay nerviosismo por las elecciones y porque se espera un salto devaluatorio después de los comicios”, detalló.

Para el economista de la Fundación Mediterrane y de la IERAL, Gerardo Alonso Schwarz, la suba del dólar que se está observando en los últimos días, va en línea con el aumento de la incertidumbre por la cercanía de las elecciones del 14 de Noviembre, la expectativa devaluatoria y las decisiones del gobierno nacional que “generan mayores dudas sobre la dinámica de la futura economía”.

En diálogo con Alonso Schwarz insistió en que “con un inflación del 53 – 54% en términos anuales, un incremento generalizado de los precios de la Canasta Básica, el dólar oficial y el blue, ha crecido en el último año solamente un 20%, si bien más en los últimos días y se acerca a la barrera psicológica de los 200 pesos”, explicó el economista sobre el valor histórico del dólar a 197 pesos.

“Entonces esto nos muestra que hay nerviosismo porque se acercan las elecciones. Y se espera que podría haber un salto devaluatorio luego de los comicios o un sinceramiento de este dólar relativamente planchado respecto de la inflación. Debería seguir más o menos el mismo ritmo de la inflación. Esto hace que se genere nerviosismo”, remarcó el economista, añadiendo que “algunas prácticas del gobierno nacional”, también “generan mayores dudas sobre la dinámica de la futura economía”.

Inflación y emisión, correlacionadas

Para Alonso Schwarz, no cabe duda que la inflación y la emisión monetaria están correlacionadas, lo que explica el salto inflacionario de los últimos meses. “El año pasado, el Banco Central (BCRA) llegó a emitir a un 80% anual respecto de la cantidad de pesos circulantes. A principios de este año se redujo esa dinámica de emisión, que genera mucha presiones en la inflación. Y llegamos a febrero o marzo con una emisión del 10-20%, se redujo muy fuertemente”, comentó.

“Luego del resultado de las PASO, el gobierno nacional comienza a gastar más y pide al Central que lo auxilie para cubrir el déficit fiscal. Así, desde Junio comenzó a acelerarse la emisión. Y hoy nuevamente tenemos un ritmo de emisión del 45% anual. No son valores que podamos decir que no generarán presión inflacionaria”, advirtió el economista.

Y agregó: “Emisión e inflación están absolutamente correlacionadas. Hay algunos periodos en los que este traslado sucede en 2 – 3 meses. Y en otros periodos, puede trasladarse a los 6 meses. Pero que termina impactando no hay ninguna duda. Hay consenso a nivel mundial sobre esto, sólo en este país discutimos estas cosas”, argumentó Alonso Schwarz, quien relativizó los argumentos que apuntan a los oligopolios o monopolios como la explicación de los aumentos de precios.

“Inflación es el incremento de todos los bienes y servicios. Si hablamos de monopolios con poder de mercado y abusar de los precios, es algo concreto de ese mercado, no se traslada a todos (los productos)”, insistió el economista.

“La inflación, el déficit fiscal y la emisión monetaria (actuales), hacen pensar que difícilmente no tengamos valores superiores a los actuales”, puntualizó.

Por qué no funcionan los congelamientos de precios unilaterales

Por otra parte, Alonso Schwarz explicó por qué, a su juicio, el congelamiento y los controles de precios no sirven para resolver el problema de la inflación, más allá de que sean electoralmente “atractivos”. “Los congelamientos de precios no funcionan. No funcionaron en los últimos 70 años. El mismo presidente (Alberto Fernández) decía, años atrás, que no funcionaban”, recordó Alonso.

De acuerdo con el economista, los congelamientos generan tres efectos: “aumenta la demanda a un precio congelado o menor al que está en góndola. Entonces (los consumidores) compran más de lo que deberían, porque (stockean) Esto genera desabastecimiento. En segundo lugar, cuando las empresas  tienen que invertir y organizar su producción, con este producto si me congelan los precios pero no los costos, que siguen subiendo, hay incentivos para que no produzcan estos bienes. Esto genera mayor escasez a futuro”, alertó el especialista.

Asimismo, Alonso llamó la atención sobre el salto inflacionario posterior a los 90 días de congelamiento dispuestos por el Secretario de Comercio, Roberto Feletti, del 1 de Octubre al 1 de Enero del 2022. “Actualmente tenemos una inflación mensual del 4%. Con el congelamiento no vas a tener ese aumento de esos productos en cada mes, pero ¿a cuánto van a actualizar cuando el gobierno de los permita? No van a actualizar a un 4% sino que van a subir, por lo menos el 12% para cubrir el rezago que tenían los precios por el congelamiento”, argumentó.

“Pero además, como a los empresarios les impidieron subir los precios durante 3 meses”, y no saben cuándo “va a venir un nuevo congelamiento, entonces suben un 15 o 20%, por las dudas”.

Entonces, el congelamiento de precios “genera desabastecimiento, desinversión en las cadenas productivas, y cuando terminen los 90 días, (los precios) van a pegar un salto y habrá más presión inflacionaria”, sentenció.