Después de un año y medio sin actividad, desde Amproe señalan que el retorno será paulatino. Se analizará el espacio de los lugares y se profundizará en el protocolo.
Desde el comienzo de la pandemia, en marzo de 2020, el rubro ligado a los eventos sociales quedó paralizado por completo, en el afán de reducir al mínimo los contagios de coronavirus. En el marco de la situación epidemiológica de Misiones, se evaluará la habilitación de eventos sociales, fiestas de 15, casamientos, y también permitir el público en las canchas de fútbol y de básquet, excluyendo la reapertura de boliches, afirmó el lunes el ministro de Salud, Oscar Alarcón.
El análisis por parte del gobierno provincial en conjunto con referentes del sector generó expectativas, luego de un año y medio sin funcionar. En este sentido, desde la Asociación Misionera de Proveedores y Organizadores de Eventos (Amproe) destacaron la iniciativa que permitirá volver al ruedo a más de 35 rubros que dependen de los eventos, cuyo regreso será bajo estrictos protocolos. Asimismo, consideraron que el retorno de los eventos sociales permitirá poner fin a un flagelo que se repitió a lo largo de la pandemia: las fiestas clandestinas.
El retorno será paulatino, y siempre sujeto a la situación epidemiológica. En los próximos días se trabajará en el protocolo definitivo. Desde Amproe precisaron que la ocupación dependerá de la superficie y de las características del espacio, si cuenta con la suficiente ventilación o al aire libre, aunque en todos los casos, el aforo rondará el 30%.
Sin embargo, el regreso será distinto, ya que en el medio cerraron un gran número de empresas de eventos. De 162 peloteros en la provincia sólo quedaron en pie 24; hay un 50% menos de empresas de catering; y en Posadas prácticamente no hay salones de eventos.
Regreso paulatino
En diálogo con Gastón Jilek, presidente de Amproe, consideró que el regreso de los eventos sociales, como los casamientos, fiestas de 15, recitales, “será el principio de solución para otra pandemia que hubo, que es el de las fiestas clandestinas que no tenían para nada de seguridad sanitaria”.
Añadió que la decisión, que se trabajará de manera mancomunada con el gobierno provincial, complementará a la reactivación del turismo. “Hay una necesidad de la gente con los eventos, además de poner en marcha todo lo que hay por detrás de los eventos, que son en total 35 rubros que dependen de los eventos sociales. Hay altas expectativas. Se necesita de los cumpleaños, de las reuniones sociales, que solamente se podía hacer con un protocolo para los gastronómicos, que es otro modelo de negocio completamente diferente”, agregó.
En esta línea, destacó que hay un compromiso del gobernador para con el sector y que se dialogarán diferentes alternativas. “El regreso será paulatino, como fue con la gastronomía, en etapas y en diferentes escalas, en el que se trabajará para concientizar a la sociedad porque hay que recordar que aún seguimos en pandemia”, acotó.
Protocolos
La confección de protocolos sanitarios es el próximo paso a realizar, con el objetivo de garantizar eventos sociales seguros.
Al respecto, Alarcón señaló a este medio que el límite de personas se establecerá en el cónclave del Comité Científico de la provincia. “Siempre con un tope de gente, nos planteamos evaluar cada situación especial” al considerar que “no vamos a arriesgar un solo paso que perjudique la estabilidad epidemiológica de la provincia”. Esto al recalcar que no se habilitarán grandes fiestas y masivas, como la que ocurrió días atrás en Puerto Mbiguá, en Ituzaingó, Corrientes.
Jilek recordó que desde septiembre del año pasado se presentó un protocolo para el regreso, aunque con el paso de los meses se fue perfeccionando. “Ahora conocemos más al virus, y sabemos cómo actuar”, agregó el titular de Amproe.
La higiene constante será clave. “Se planteará la realización de test PCR sobre un porcentaje de la unidad asistente, para que haya una trazabilidad. Se tomarán los datos y direcciones para acceder a ese núcleo, en el caso que haya un caso positivo, y se tomen las medidas correspondientes al aislamiento”, detalló. Para ello será fundamental, en esta instancia, el relleno de planillas con datos personales, para lo cual habrá un organizador responsable. “El municipio es el ente regulador que deberá autorizar. Una vez que haya una autorización, se procederá a la realización de las otras instancias”, contó.
Respecto de la capacidad, indicó que arrancará con un 30%. Todo ello dependerá de la superficie del evento, de la ventilación y circulación del aire, en el afán de cumplir con los protocolos. “Se analizará mucho el espacio donde se realice, para asegurar el distanciamiento y la correcta ventilación. No es lo mismo una cancha de fútbol que un casamiento. Por ejemplo, en un salón donde antes había 400 personas ahora habrá poco menos de 100 personas”, indicó.
En este contexto, recordó que hubo un gran número de empresas de la actividad que cerraron por el parate. “A diciembre, de 162 peloteros en la provincia quedaron 24; y de 50 que había en Posadas quedaron sólo cuatro. Los catering quedaron menos del 50 por ciento de las empresas, y se despidieron mozos, cocineros, vender los elementos. Lo mismo pasó con lo que es sonido e iluminación. En Posadas, ya prácticamente no hay salones de eventos, entre que cerraron y los pusieron en alquiler para sostenerse”, detalló.
Expectativas
“La noticia la recibimos con mucho ímpetu, estamos contentísimos de que a partir del 1 de agosto empiecen a estudiar alguna apertura en el sector”, destacó Paola Yauni, socia gerente del Salón Soleil.
En diálogo afirmó que “desde el año pasado debimos posponer muchos eventos, algunos siguen a la espera de la realización pero la gran mayoría pidieron que se reembolse el dinero, sin postergación”.
“Para fin de año se empezó a preguntar. Hasta la semana pasada debía responder que no había novedades, con la noticia de ayer creo que para diciembre podríamos estar trabajando”, estimó Yauni.
Por su parte, Valeria Cappagli, productora de eventos, manifestó que “la noticia del regreso es espectacular, es algo que esperábamos, nos pone muy contentos. El hecho de trabajar y volver, aunque sea con pocas personas, significa mucho para nosotros”. Indicó que la pandemia afectó a la actividad “por lo que fue muy notable la baja y la cantidad de trabajos que se perdieron, porque el evento es un rubro que tiene muchas personas por detrás, desde catering, fotógrafos, mozos, sonido, la lista es extensa. Los productores de eventos no fuimos los únicos afectados, sino todos los rubros ligados a él”.
Cristian Bermúdez, quien se encarga de la organización de eventos en el Salón La Stanza, en Posadas, sostuvo que “de alguna u otra manera se buscará arrancar después de un año y medio. Pero hay que tener en cuenta la situación epidemiológica y que haya una estabilidad, además de que avance la vacunación, que es importante. Estaría bueno que se trabaje, sobre todo porque tenemos parado inversiones y muchas cuentas por pagar”.