El opositor Luis “Pato” Silva dijo que tiene temor a ser expulsado y que apelará la sanción porque no tiene sustento jurídico. Los que aprobaron la multa lo acusan de violencia institucional y querer toma el edificio municipal.

Los tres concejales renovadores que responden al intendente Pablo Castro aprobaron una insólita resolución en la que multaron a otro edil del frente Cambiemos con 6.000 pesos. El sancionado, Luis “Pato” Silva, dijo que apelará la medida porque “no tiene sustento jurídico”.

La decisión del bloque oficialista se tomó en la sesión ordinaria del lunes y todo indica que sería una represalia contra el concejal opositor que pidió revisar el balance municipal, aprobado a libro cerrado por la mayoría.

La multa al opositor

En la resolución 01/2021 aprobada el lunes por los oficialistas, el Concejo tomó como fundamento una nota del intendente en la que repudió hechos de violencia institucional, supuestamente liderados por el concejal Luis Silva.

Los hechos violentos a los que se refiere la nota del intendente, no son más que un pedido de informes por parte del concejal sancionado y algunos diputados provinciales de Cambiemos que se acercaron hasta el edificio municipal en la última semana de julio. Mientras estaban explicando su reclamo fueron rodeados por seguidores de Castro y luego sacados del edificio municipal a los empujones. Hubo varios videos que se viralizaron con los hechos.

Según la nota del intendente, hubo “violencia inaceptable” de los opositores, cosa que no se observa en ningún caso en los videos que circularon de los incidentes. Lo que se observa es que los opositores fueron expulsados por la fuerza.

Sin embargo, los concejales tomaron como la “única verdad” la nota del intendente y agregaron en la resolución que “el concejal Silva no se ha conducido de acuerdo a la investidura de concejal, traicionando a la comunidad que lo ungió en el cargo con el voto, descuidando y poniendo en riesgo la paz social”.

Lo acusaron de pretender tomar el municipio y remarcaron que “de acuerdo a lo establecido en el artículo 139 de la Ley Orgánica de Municipalidades y al reglamento interno de este cuerpo, corresponde impartir una sanción ante este tipo de hechos que dañan a un poder importante como es el Concejo Deliberante”.

Por esta razón, votaron que correspondía aplicar una sanción “severa” por seis mil pesos que deberán ser depositados en la cuenta de la Municipalidad.

Temor a ser destituido

El concejal Silva explicó ayer que “vamos a apelar esta resolución porque no tiene sustento jurídico. Esto es inédito, nunca antes se escuchó una multa por pedir que se revise la documentación del balance municipal”.

En cuanto a los incidentes que se produjeron en el edificio municipal, Silva relató que “yo solicité tres veces que me faciliten las facturas del balance municipal, pero se negaron, entonces fui acompañado por un grupo de diputados provinciales en ejercicio y recién electos”.

Agregó: “Yo estaba hablando con el intendente en su oficina y empezó a entrar gente por una puerta de atrás, empezaron a gritar y a empujar a los diputados, hay videos que muestran como ocurrió todo, nos sacaron prácticamente a patadas del edificio municipal. Nunca hubo un intento de tomar la Municipalidad, es mentira, sólo fuimos a pedir transparencia en el balance”.

Dijo Silva que su asesor legal “está trabajando en la apelación de esta multa porque me acusan de cosas que nunca hice”.

Por otra parte indicó que “son cuatro renovadores y soy el único opositor. Así como se están manejando, tengo miedo a que me destituyan o me quieran expulsar”.

Los tres concejales que votaron la multa y responden al intendente Castro son: Leonardo Acosta (presidente)Lucía Valenzuela (Vice) y Eduardo Falcón. El cuarto renovador, pero que no votó con ellos es Pedro Matto.