La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) incautó tres kilogramos de cocaína de máxima pureza y detuvo a un hombre de 49 años. Los detalles del procedimiento.
Las investigaciones y seguimientos no dejaban lugar a dudas. Los sabuesos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) tenían la certeza de que el operativo iba a ser positivo y se aseguraron de que así sea, pero no esperaban semejante incautación.
Como se informó , el viernes allanaron un kiosco narco y secuestraron tres kilogramos de cocaína de máxima pureza, algo inédito en procedimientos de este tipo. El valor de esa droga, sin el proceso de corte o “estiramiento”, es multimillonario -todavía no se estableció oficialmente el valor- y su hallazgo abrió muchos interrogantes.
Según pudo saber el medio mediante fuentes del caso, esas preguntas podrían empezar a responderse en la jornada de hoy. El detenido que tiene el hecho, que se encuentra en una celda incomunicado, será trasladado a una audiencia indagatoria ante el Juzgado Federal de Posadas, a cargo de la jueza María Verónica Skanata.
Allí será imputado por los elementos que hay en su contra y tendrá la posibilidad de dar su versión de los hechos o bien abstenerse de declarar, sin que esto implique un elemento en su contra.
Se trata de un hombre de 49 años, que en principio no tiene antecedentes penales ligados al submundo del narcotráfico. Al momento del allanamiento en su casa había dos personas mayores – un hombre y una mujer- que por orden judicial no fueron detenidos. La mujer es su pareja y seguirá el proceso en libertad en razón de que tienen una hija menor de edad a la que tiene que cuidar.
Sin embargo, voceros señalaron que su participación en la venta de droga sería activa. La continuidad de la pesquisa, confirmará o no está hipótesis.
Como adelantó este medio, las pesquisas se iniciaron hace más de seis meses, luego de una denuncia anónima ante la Justicia Federal. Los efectivos de la Unidad Operacional del Control del Narcotráfico y el Delito Complejo hicieron tareas de investigación encubierta e intervinieron teléfonos.
El presunto kiosco narco se encuentra en la intersección de las calles 84 y Tito Cucchiaroni de Posadas, justo detrás de la estación de servicio que queda en la esquina de las avenidas San Martín y Chacabuco. Y puede decirse que tenía una doble pantalla: de día funcionaba un lavadero de autos y de noche una especie de carrito donde se elaboraban comidas rápidas.
Se determinó que el movimiento era constante, pero no para estas transacciones. El cliente llegaba, entraba al inmueble por un lapso corto y salía con las manos vacías. Por lo menos a simple vista.
Con todos estos elementos, el viernes se estableció como el Día D y, con autorización de autoridades judiciales, se montó el operativo cerca de las 21. En primera instancia se esperó hasta que se registre una transacción, por lo que interceptaron a un comprador que llegó al lugar y cuando confirmaron que tenía estupefacientes en su poder, ingresaron al domicilio.
Resultados y contraste
En el presunto búnker había marihuana y cocaína fraccionada, además de balanzas de precisión, cerca de 33.000 pesos en efectivo, celulares y otros elementos de interés para la causa. Los panes de cocaína, en tanto, se hallaban en una mochila oculta en una de las habitaciones.
El producto pesó 3,300 kilos y los panes tenían una estampa de delfines, por lo que se cree que procede de Bolivia, como la mayor parte del polvo blanco que ingresa a Misiones.
Los pesquisas coinciden que es desproporcionada la cantidad de droga con el perfil del detenido, más teniendo en cuenta el nivel de vida con el que se encontraron, con muchas carencias. Como se dijo, esa cocaína tiene un valor de varios millones de pesos. Por eso los interrogantes y las sospechas de que simplemente estaban ahí guardados. ¿A quién le pertenecían?
En cifras
$33 mil Además de los panes de cocaína y la droga fraccionada se incautaron más de 33.000 pesos en efectivo y tres celulares que serán sometidos a pericias.