La jueza federal con competencia electoral María Servini evalúa la posibilidad que se extienda por una hora el horario de votación en escuelas de la Ciudad de Buenos Aires.
“Tenemos previsto darle números a los que queden en la fila después de las 18”, afirmó la magistrada al anticipar que los establecimientos educativos podrían cerrar a las 19.
“Podría ser que se prorrogue alguna hora más o lo que se necesite”, en aquellas mesas donde haya gente esperando en la cola para votar, explicó Servini en declaraciones periodísticas.
Además, advirtió que la “la lentitud” del desarrollo de la elección en algunas mesas se motiva en el “cumplimiento del protocolo” relacionado a los cuidados sanitarios por la pandemia del coronavirus.
“Las escuelas son todas diferentes. Habrá escuelas que irán más rápido y otras no, depende la distancia que tiene adentro, la ubicación de las mesas, depende de muchas cosas”, señaló.
Las peores elecciones
Servini calificó a las PASO que se están desarrollando hoy como “las peores elecciones” de las 26 en que le tocó intervenir.
“Estamos en pandemia y hay un doble comando que lo complica todo”, reflexionó Servini, en alusión a las diferencias manifiestas que tiene con la Cámara Nacional Electoral.
La magistrada describió que hubo “demoras en el Correo” para la distribución del material electoral, responsabilizó al Comando Nacional Electoral por la falta de alcohol en todas las mesas de votación y advirtió que en varios establecimientos faltaron los “facilitadores sanitarios”.
“Son las peores elecciones de las 26 en que me tocó intervenir. Y las consecuencias de esas cuestiones organizativas que fallaron las padece la gente”, se quejó Servini.
La jueza explicó que surgieron grandes dificultades en la conformación de las mesas de votantes extranjeros, a punto tal que en dos de ellas fue necesario designar a autoridades nacionales para que se pudiera abrir el acto eleccionario.
Además, se quejó por las capacitaciones del personal que intervino y que no conocía adecuadamente los mecanismos para acelerar el proceso y superar las dificultades lógicas de cada acto comicial.
A diferencia de otras elecciones, la jueza no organizó hoy una reunión con apoderados, pero sí salió a recorrer escuelas para comprobar in situ el estado de situación.
Allí se encontró con largas filas en la calle para votar, y dio cuenta de ello a las autoridades del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para que solucionaran la situación.