Vendedoras indicaron que el boom vino tras la pandemia. Las ferias son una opción de vestimenta en buen estado y a bajo precio. Para muchos, una fuente de ingreso
En los últimos tiempos, no sólo en Argentina, sino en distintas partes del mundo, las ferias americanas, ventas de garaje o los distintos nombres que se le han dado, ganan terreno. En nuestro país los altos niveles de inflación llevan a que muchos opten por la ropa usada para vestirse.
Algunos por estilo, otros por los costos, lo cierto es que cada vez más gente elige esta indumentaria, ya sea en ropa, calzado o accesorios. Además, esta alternativa se impone como un método más de ingreso para muchos que comienzan vendiendo ropas de su placard y luego extienden su negocio y no solamente venden, sino que también compran.
En ese contexto, vendedoras de Posadas en diálogo comentaron que las ventas se dispararon tras la pandemia de Covid-19. Las prendas nuevas pueden costar hasta un 80% más que las usadas que se venden en locales, ferias al aire libre y online.
Tal es el caso de Andrea López y Belén Brítez, que iniciaron su feria hace doce años para juntar dinero para un viaje. Poco a poco, se hicieron más conocidas, se mudaron de ubicación varias veces y ahora están hace algunos años en España y Trincheras de San José. Durante la pandemia optaron por vender de manera virtual y les fue bien. Actualmente tienen una clientela fija.
“Comenzamos porque mi socia Andrea tenía mucha ropa. Nos pusimos en la vereda de la casa de nuestros padres sin avisar a nadie. Después la gente nos preguntaba cuándo lo hacíamos de nuevo, porque nos habían visto”, comentó Brítez.
Lo que más compran los clientes es la ropa de trabajo y para niños.
Por aquellos tiempos convocaban a sus clientes a través de mensajes de texto indicando lugar y fecha. Con el pasar de los años fueron aumentando la clientela y las redes sociales facilitaron las ventas y promociones de ropas, zapatos y accesorios. Luego ya no fue suficiente con la ropa que juntaban entre amigas para vender y tuvieron que expandir su negocio por la demanda y comprar ropa usada para revender.
“El requisito es que la ropa esté seminueva o al menos en buenas condiciones. El auge en las ventas llegó en la pandemia por Covid-19. Aunque siempre vendimos bien y también implementamos la venta online con envíos por motomandados. Tenemos ropas de damas, caballeros y chicos, además de variedad de zapatos y carteras”, agregó.
En la misma línea mencionó que las prendas de marcas reconocidas las venden hasta por un 80% menos que la prenda nueva. La mayor demanda está en camisas y pantalones de trabajo para damas y ropa para niños. En tanto, en lo que refiere a vestimenta masculina siempre les falta stock ya que se venden muy rápido.
Así, lo que antes era una tendencia de ellas fue cambiando y tanto hombres como mujeres eligen las prendas de segunda mano.
Actualmente realizan ferias en su local dos o tres veces a la semana y publican los horarios en su Instagram ‘Feria Andrea y Belén’.
Ferias online y al aire libre
Así como Andrea y Belén comenzaron vendiendo en una vereda, en Posadas hay varios puntos de comercialización al aire libre como la Costanera, la plaza Sarmiento de Villa Cabello o en cercanías a las ferias francas. En una mesa, en el suelo sobre una alfombra o en el mínimo espacio, vendedoras aprovechan para ofrecer y exponer sus artículos de segunda mano.

Adriana y Graciela son dos amigas que se organizaron para vender las prendas que iban dejando acumuladas. La iniciativa surgió en una tarde de mates, cuando puntualizaron que los chicos crecen rápido y dejan ropa impecable.
“En mi caso que tengo hijos chiquitos, tengo un montón de ropas y las de grande que vamos dejando de usar, que pasan años guardadas. Entonces decidimos juntar todo y empezar a vender en alguna feria”, contó Graciela a este medio.
Asimismo, detalló que algunos domingos desde antes de las 8 se ubican en cercanías a la feria de la Chacra 32-33 y se vende mucho. “Tanto ropa de chicos como de adultos, pantalones y camisas que si están en buen estado, la gente compra. Hoy en día con toda la situación económica que estamos viviendo se hace imposible ir al centro y comprar ropa nueva. Entonces ven esa opción de recorrer las ferias”, agregó.
En el mismo marco, cada vez más surgen ferias de venta online en redes sociales como Facebook e Instagram por grupos de WhatsApp. Precisamente la ‘Feria Usada y Online’ surgió para disminuir la cantidad de prendas.
“Arranqué el año pasado para tener más espacio y ahora lo hago porque ya es una fuente de ingreso. Lo que no uso lo vendo a menos de la mitad de lo que cuesta nuevo y de esta manera también me sostengo”, sostuvo la emprendedora de la feria online, Selene Mansilla.